La tortícolis es una condición dolorosa que se produce cuando algunos de los músculos del cuello se contraen y dificultan el movimiento de la cabeza.
Casi siempre aparece cuando el músculo esternocleidomastoideo se resiente a causa de una mala postura al dormir o permanecer sentados.
El afectado puede quedar incapacitado mientras dura la contracción muscular, ya que presenta un fuerte dolor cervical, movimientos limitados y, algunas veces, dolor de cabeza y un ligero temblor.
Si bien esto se considera benigno, los síntomas son muy molestos y pueden impedir la realización normal de las tareas cotidianas.
Por fortuna, existen varias medidas que se pueden tomar al instante para acelerar su recuperación y sentir alivio.
A continuación te revelamos las 9 principales para que no dudes en aplicarlas ante esta situación. ¡Descúbrelas!
1. Aplica almohadillas de calor en el cuello
La aplicación de almohadillas o compresas de calor es muy útil para disminuir el dolor cervical y estimular la relajación muscular.
Estas activan la circulación y contribuyen a oxigenar los músculos para calmar la tensión.
¿Qué debes hacer?
Si no tienes almohadillas de calor puedes rellenar un calcetín con lentejas y, tras amarrarlo, ponerlo un par de minutos en el microondas.
Tras asegurarte de que está a una temperatura soportable, ponlo sobre la zona rígida y déjalo actuar unos 15 minutos.
Por otro lado, también puedes sumergir una toalla en agua caliente y repetir el mismo proceso.
2. Masaje con aceite de lavanda
Las propiedades antiinflamatorias del aceite de lavanda pueden aprovecharse para calmar la tensión y disminuir la hinchazón muscular.
Su aroma es relajante y controla el estrés asociado con esta condición.
¿Qué debes hacer?
Ponte unas cuantas gotas de aceite de lavanda en las palmas de las manos y aplícalo con un suave masaje.
Evita ejercer demasiada presión porque esto puede agravar la lesión.
Repite su aplicación si lo consideras necesario.
3. Masaje con aceite de árnica
Tanto el aceite como los ungüentos de árnica son útiles para la disminución de la inflamación de los músculos contraídos.
Su acción analgésica alivia el dolor y disminuye la sensación de rigidez que impide el movimiento.
¿Qué debes hacer?
Adquiere el aceite de árnica en tiendas herbolarias y aplícalo con un masaje suave, sin presión.
Repite su uso dos o tres veces al día.
4. Infusión de orégano
El orégano tiene propiedades antiinflamatorias y relajantes que también contribuyen a aliviar la tortícolis.
Su infusión ayuda a aflojar los músculos nerviosos del cuello para calmar el dolor y la rigidez.
Ingredientes
1 cucharada de orégano (10 g)
1 taza de agua (250 ml)
¿Qué debes hacer?
Pon a calentar la taza de agua, agrégale una cucharada de orégano y déjala reposar diez minutos.
Cuando esté lista, pásala por un colador y consúmela.
Puedes tomarla hasta dos veces al día.
5. Infusión de manzanilla
Otra bebida calmante y analgésica es nada más y nada menos que la infusión de manzanilla. Esta hierba terapéutica puede aprovecharse tanto de forma tópica como a nivel interno.
Ingredientes
1 cucharada de flores de manzanilla (10 g)
1 taza de agua (250 ml)
¿Qué debes hacer?
Calienta la taza de agua, agrégale las flores de manzanilla y déjalo reposar diez minutos.
Pásala por un colador y consúmela.
Si lo prefieres, puedes sumergir un paño en el líquido y aplicarlo de forma local.
Repite su consumo dos veces al día.
6. Cuida tu postura
Ante una fuerte tortícolis es primordial mejorar la postura y evitar movimientos bruscos que comprometan el cuello.
¿Qué debes hacer?
Si pasas varias horas seguidas frente al ordenador, mantén la espalda recta y sitúa la pantalla a la altura de la vista para no tener que forzar la nuca.
7. Consigue una almohada apropiada
En ocasiones el dolor de nuca persiste por varios días o se da de forma recurrente. En estos casos especiales lo mejor es adquirir una almohada cervical, diseñada para proteger el cuello y asegurar un buen descanso.
8. Haz ejercicios terapéuticos
Si bien no se recomienda hacer movimientos bruscos ante este problema, sí es conveniente poner en práctica algunos ejercicios terapéuticos que mejoran la circulación y calman la tensión:
Mueve la cabeza de adelante hacia atrás durante varios minutos. Evita inclinar demasiado la cabeza porque puede causarte dolor.
Inclina la cabeza de un lado a otro para que los músculos de la parte trasera y delantera logren un estiramiento.
Trata de moverla de izquierda a derecha, siempre evitando ejercer demasiada presión. Este ejercicio suele ser uno de los más dolorosos, así que hazlo despacio.
9. Terapia Quiropráctica
Sin lugar a ninguna clase de dudas, la terapia quiropráctica es la mejor opción para el tratamiento de este mal; sus efectos son inmediatos y restablece hasta en un 95 por ciento, la movilidad del cuello o la nuca. (llámanos: 998488824 sólo Perú)
Artículo tomado de:
http://epmundo.com/alivia-la-torticolis-o-dolor-de-cuello-con-estas-efectivas-recomendaciones/